(Mateo instantes antes del percance)
El libro de los records tiene un nuevo miembro, Mateo Jackson, que en Güisconsi se dejó la mandíbula como un libro abierto durante una refriega con su Hamburguesa. Mateo, que tiene la misma cara que el toro que mató a Paquirri acudió a su restaurante favorito y pidió el “Happy empacho” que consta de una hamburguesa completa de dos kilos, una tortilla de patatas de 3 huevos, un litro de refresco, una botella de Valdepeñas, un banana Split, una caja de polvorones de la Estepeña y sal de frutas. (casi ná)
Según relatan testigos de los hechos el bueno de Mateo sufrió su percance porque mientras habría la boca para engullir le dio por bostezar y claro…”un poco más y se le sale la piel del pellejo” declaró traumatizado un testigo presencial.
Tras el traumático record (65 cm), Mateo fue ingresado en el Sagrado Corazón de Güisconsi donde precisó para solucionar su dislocación de la última tecnología médica. El Doctor Jonhson (el del aceite de los peques) le aplicó una “kick in the mounth” que surtió los efectos deseados sin ninguna secuela salvo la incapacidad de dormir sin un crucifijo en la mesilla.
Tras salir del Hospital el nuevo recordman declaró “Estoy muy satisfecho, siempre quise tener un record de los Guinnes y ya previamente lo había intentado, saltando a la comba a la pata coja tocando el violín, el problema es que no sé tocar el violín y tenía que imitar el ruido con la boca y claro...el juez me descalificaba”. No hay mal que por bien no venga, al bueno de Mateo le han ofrecido participar en la película de Serie B “Moby Dick contra Godzilla”. Se rumorea que Arévalo podía hacer de Godzilla. "Aunque el sueño de mi vida siempre fue tener un secadero de jamones" declaró Mateo.
(Recreación aproximada del record de Mateo)
No hay comentarios:
Publicar un comentario