La peor de las sectas…..los Truños, digo los Tunos.

Voy a aprovechar esta entrada en el Blog para despacharme a gusto contra la segunda cosa que más odio del mundo después de los polvorones de bacalao con tomate…los tunos.

Pues sí amiguetes, los tunos son la peor cosa que le ha pasado al planeta tierra después del impacto de meteorito que mató a los dinosaurios (aquello por lo menos fue rápìdo) y hay quien piensa que el anticristo se reencarnará en un energúmeno bandurriero que castigará a los mortales (los muertos no tendrán que pasar por ese trance) con canciones tales como clavelitos, el vino que tiene Asunción, etc, mientras que el tuno epiléptico menea la pandereta arrojando espuma por la boca.

Los tunos corresponden al arquetipo de feo, pesao que no se come ni una rosca y que espera que apuntándose a la tuna ser el rey de la noche, un rompebragas ante el cual las mujeres caerán rendidas al primer acorde…..tristemente la realidad supera la ficción y estos exitosos estudiantes ¿?, inspiradores del vestuario de Locomía y gorrones en extremo, intentan lavar el cerebro a las féminas (mozitas para ellos) con una bandurria, canciones repetitivas y una capa tipo Batman - Marichalar.

Si el infierno existiera para mi sería un sitio en el que hace mucho calor y en el que estoy sentado a un lado con la Patiño, a otro el jodío erizo de los seguros y la tuna sonando en el hilo músical por toda la eternidad.

En página 166 del Libro Record de los Guinnes podeis leer que el record mundial de finalización de carrera de un tuno es de 15 años, la mayoría de los tunos ya empezaron repitiendo parvulitos y siguieron su exitosa carrera académica pentaripitiendo todos los cursos, llegando algunos a la facultad a la notable edad de 87 años, como el el caso de Manolo Martínez, en cuya tumba sus compañeros de Tuna le pusieron “aquí ya no toses Manolo”.

Y no, nunca me quitó una novia un tuno.